Es una parte de la fisioterapia pediátrica que detecta y soluciona problemas en lactancia materna cuyo origen o uno de los factores principales tienen que ver con disfunciones del aparto musculoesquelético. Y que, por ende, impiden llevar a cabo una lactancia materna feliz y sin dolor. En resumen, consiste en detectar, diagnosticar y realizar tratamiento manual en los bebés y/o en las mamás para ayudar en el establecimiento de la lactancia materna, conseguir en definitiva una lactancia exitosa, una alimentación saludable y sin complicaciones.
Fisioterapia Lactancia Materna
¿Cuáles son los principales problemas a tratar a través de la fisioterapia en lactancia materna?
- Dolor por mal agarre o succión
- Grietas en el pecho
- Agarre (no es capaz de agarrarse o se agarra mal)
- Problemas de colocación
- Problemas de peso, pérdida excesiva o que la ganancia de peso sea insuficiente
- Frenillo corto / Anquiloglosia
- Problemas cervicales
- Problemas relacionados con la movilidad y coordinación de la lengua
- Problemas sensoriales de la boca, lengua y cara del bebé
- Tensión o dolor que dificulte todo lo anterior
Problemas de manejo y falta de experiencia social
Mamá y bebé pueden tener problemas de adaptación o de manejo a la hora de dar de mamar, por eso enseñamos distintas posiciones (porque lo que a una persona le va bien no le tiene porque ir bien a las demás), uso de cojines, etc.
La falta de experiencia social se debe a que con el paso del tiempo se ha perdido la costumbre de dar “la teta en público” esto trae como consecuencia que otras madres dejen de aprender gracias a la visualización del momento. También os ayudamos y os aconsejamos en lactancias en tándem, lactancias múltiples y destete.
Anquiloglosia
Se produce cuando hay movimiento restringido de la lengua. Puede existir anquiloglosia sin frenillo (membrana) y frenillo sin anquiloglosia (movimiento lingual normal). Lo importante es la función lingual, valorando movilidad, función y fuerza.
Signos y síntomas:
- En la madre – grietas, mastitis de repetición, dolor al amamantar, obstrucciones, síndrome de Raynaud, hipo o hipergalactia, etc.
- En el bebé – mal agarre, chasquidos, succión ineficaz, pérdida de peso o poca ganancia, cólicos, tomas largas, retrognasia, paladar ojival, asimetrías faciales, regurgitaciones, atragantamientos, etc.
- Más allá de la lactancia – paladar ojival, apiñamiento dental, dolor cervical, lumbar y cefaleas, síndrome de apnea del sueño, dislalia, etc.
¿Cuándo es necesario intervenir? Cuando hay anquiloglosia junto con problemas en la lactancia o si no existen problemas de lactancia, pero hay signos que indican patrón compensatorio. En caso de intervención lo ideal es cuando el bebé es menor de 3 meses, ya que produce una mejor recuperación de la función, y es más fácil la realización de los ejercicios de rehabilitación.
En consulta valoraremos si hay o no la existencia de frenillo, la función de la lengua y ejercicios postfrenectomia para realizar por la familia del bebé, en caso de ser necesaria la cirugía se informaría a los padres y se derivaría para su realización.
Mastitis
La mastitis es una inflamación de la mama que puede ir acompañada de una infección. Los conductos bloqueados y la congestión de los pechos también pueden provocar una mastitis si no se tratan convenientemente.
Problemas musculoesqueléticos
Desde la fisioterapia y la osteopatia valoramos todas las estructuras implicadas tanto del bebé como de la mamá en la lactancia. Por ejemplo, un bebé con tortícolis que no le permita adoptar la postura para amamantar va a rechazar dicha postura. En el caso de las mamás cervicalgias, dorsalgias, lumbalgias, etc.
Grietas en el pecho
Son heridas que se producen en el pezón por una mala técnica en el momento en el que tu bebé está mamando. Son muy dolorosas. Puede que incluso haya sangrado durante o después de las tomas. Para el bebé no hay ningún problema ya que él saca leche igual, pero para la mamá puede llegar a ser angustioso.